El pasado 21 de agosto del presente año, el Concejo de Estado dio a conocer, en segunda instancia, el fallo que declara nula la elección de Jaime Andrés Beltrán a la alcaldía municipal en las elecciones de 2023 al incurrir en doble militancia, durando 20 meses en el cargo. Ante esto, Bucaramanga se enfrentará a elecciones atípicas para la elección de un nuevo mandatario antes de que termine el año.
El gobernador de Santander Juvenal Díaz Mateus deberá elegir un alcalde provisional desde la terna que propondrá la coalición que avaló a Beltrán, mientras se da cumplimiento a las elecciones atípicas; esto, tras la confirmación del Tribunal Administrativo sobre la nulidad de la elección del mandatario en la sentencia proferida inicialmente el 12 de diciembre de 2024, concluyendo que existen pruebas suficientes que ratifican la decisión. A medida que avanza el proceso, las especulaciones sobre los posibles candidatos empiezan a intensificarse, generando intriga en diversos sectores políticos y sociales.
El fallo que anula la elección de Jaime Andrés Beltrán se produce al incurrir en apoyo a candidatos para el Concejo de Bucaramanga pertenecientes al partido de La U y el Centro Democrático, distintos a quienes le habían dado el aval; conducta definida como doble militancia y establecida en el artículo 275 de la ley 1437 de 2011. Ante esto, la respuesta de Beltrán no tardó en generar controversia al deslegitimar la decisión de la justicia. “No les conviene tener una figura política como Jaime Andrés (...) hoy más que nunca entiendo que, los que recopilaron mentiras y crearon falsos demandantes para anular nuestra elección, tienen miedo de lo que puede lograr nuestra visión de país, que va en contravía de la de ellos”, aseveró por la red social X.
Para el politólogo Fabián Guerra Mayorga, esta afirmación politiza un resultado que debe permanecer técnico y judicial. “Ni siquiera es que anulen a Jaime Andrés como alcalde. El término legal es que anulan el fallo del Concejo Nacional Electoral como alcalde en 2023; a raíz de eso, sus acciones como mandatario quedan también nulas”, aclara.
Los posibles aspirantes
La expectativa entre los bumangueses sigue en aumento, no solo por las diversas declaraciones del actual mandatario, sino también por la rápida aparición de los posibles aspirantes al cargo. Los partidos políticos, por su parte, han comenzado a estudiar sus posibilidades dentro de la contienda electoral.
El abogado y especialista en gerencia pública Cristian Reyes Aguilar, concejal de Cambio Radical, cuenta con gran experiencia dentro del sector comercial, desarrollo urbanístico y movilidad, presentándose como una opción que podría unir diferentes sectores de la ciudad. “Yo trabajo mucho con el adulto mayor, con el comercio, con los transportadores (...) tratando de buscar soluciones en los barrios. Entonces eso me ha llevado a que nos posicionemos no como Cristian Reyes, sino como un equipo de trabajo”, menciona Reyes sobre su gestión actual.
Respecto a su posible candidatura, Cristian Reyes se muestra sorprendido por la postulación, pues el asegura que la misma ciudadanía ha sido la encargada de poner su nombre sobre la mesa para estas elecciones, y aunque no descarta oficializar y ponerse a disposición, recalca que en su ideal siempre ha estado trabajar en una campaña para una alcaldía de 4 años donde acentúe su labor ciudadana y su deseo de consolidación de la derecha en el territorio.
Dentro del mismo Cambio Radical, destaca también el abogado José David Cavanzo como uno de los opcionados a ser candidato a la alcaldía de la capital del departamento. Con más de diez años de experiencia en el sector público, gran parte de su trayectoria profesional ha estado vinculada a la administración estatal; algo que para Cavanzo es muy importante al momento de elegir un nuevo mandatario en este periodo. “Cuando uno está en gobierno con la experiencia que yo he tenido en gobierno (...) está toda la toda la ciudad esperando que usted le resuelva todos los problemas", considera Cavanzo.
“Con ganas, y si no estamos concentrados en demandas y en resolver temas o intereses personales, podemos sacar adelante el empréstito; el intercambiador de la 45 con novena; el de la 57 con 56; el par vial de la 54; sacar adelante la obra de la Virgen de La Cemento (...) hay muchas cosas por hacer en Bucaramanga y por eso es mi interés de participar”, expresó Cavanzo, dejando ver su disposición por el avance de la ciudad, junto a una fuerte crítica a la gestión de Beltrán.
Y un rostro familiar desde las pasadas elecciones de 2023 es Carlos Felipe Parra, abogado y máster en estudios de paz. Parra hizo saber durante los 20 meses de gestión de Beltrán sus diferencias ideológicas y críticas a su gestión, señalando incumplimiento en las promesas de seguridad hechas por Beltrán antes y durante su mandato, la falta de un modelo de transporte público y múltiples escándalos de corrupción como el de la Unidad de Bienestar Animal, el de la Fundación Pintando Huellas, la desaparición de la chatarra que cuantificó pérdidas de 21.700 millones de pesos, entre otros. “El propósito central de este gobierno es recoger plata para un grupo político”, agregó.
El concejal mantiene su aspiración por la alcaldía como alternativa dentro del escenario electoral, respaldada por una base ciudadana que exige una transformación en la administración local; Sin embargo, argumenta que trabajar sobre un plan de desarrollo fundamentado en otros valores e ideales “es una limitante muy difícil”, por lo que es posible que desista de participar en las elecciones atípicas, optando por un mandato completo.
Diferencias y similitudes
Algo en lo que coinciden los tres concejales es en la gran afectación que esta situación ha generado en la ciudad, ya que todos concuerdan en que unas elecciones atípicas representan un desgaste institucional y retrasan el avance de proyectos clave. Cavanzo, con una postura más directa, rechaza la respuesta que Beltrán ha tenido respecto al fallo. “El alcalde insinuó que esto era un golpe de la izquierda y digamos que eso puede ser irrespetuoso (...) porque aquí independientemente de cualquier cosa, insisto, él no cumplió con la ley. Tiene una sanción”. Adicionalmente, Cavanzo propone el beneficio que tendría la pedagogía por parte de las entidades electorales hacia los candidatos y así evitar molestias.
Bajo esta misma línea, Reyes se centra en las afectaciones que generó esta situación dentro de la misma administración realizada por Jaime Beltrán. “Tropiezos administrativos, demora en los procesos y genera adicionalmente o generó la demanda por doble militancia al alcalde, pues que él no pudiera concentrarse en gobernar y tuviera que concentrarse en defenderse ante la justicia”, consideró.
Las elecciones todavía no tienen una fecha oficial estipulada, y aunque según la Registraduría para finales de año ya debería conocerse el nombre del candidato que tome el cargo de Jaime Beltrán, el panorama sigue siendo incierto. Mientras algunos sectores analizan sus posibilidades y afinan sus estrategias, otros aún definen si participarán o no en la contienda. Bucaramanga, en medio de un clima de tensión institucional y expectativa ciudadana, se encamina hacia una contienda decisiva en el rumbo de su administración.