El Barbudito de Páramo, también conocido como Colibrí Chivito, es una de las 84 especies de aves endémicas (únicas) del país. Avistado por última vez el 9 de agosto en los páramos de la cordillera Oriental, El Barbudito suma una observación más a las 1.640 registradas por eBird, la base de datos de aves más grande del mundo, desarrollada por el Laboratorio de Ornitología de Cornell.
Juan Camilo Quintero fue el encargado de registrar su más reciente avistamiento. El fotógrafo colombiano logró captar el colibrí de especie Oxypogon guerinii, en medio de condiciones retadoras: “el clima estaba en nuestra contra, pero si algo he aprendido a lo largo de los años, es aprovechar cada oportunidad en la naturaleza, un mal clima también hace parte de la naturaleza y también se le puede sacar el máximo provecho”, afirmó a través de sus redes sociales, haciendo alusión a la lluvia y la neblina que acompañaron el registro.
Captar El Barbudito es una tarea compleja, pues habita en páramos húmedos dominados por frailejones, ubicados en alturas que sobrepasan los 3000 metros sobre el nivel del mar. El páramo de Siscunsí, en Boyacá, es un ejemplo de ello; allí, el clima se caracteriza por la humedad constante y temperaturas que han alcanzado hasta los 30 °C en el día y -4 °C en la noche. Condiciones como estas hacen de su último avistamiento un registro de valor para su conservación.
¿El Barbudito se ha visto en Santander?
Aunque la mayoría de sus ejemplares habitan en Cundinamarca y Boyacá, existen avistamientos de él en Santander.ebird reporta 65 observaciones del Oxypogon guerinii entre 2019 y 2024 con 9 registros fotográficos captados en El Páramo del Almorzadero y El Páramo de Guantiva-La Rusia.
Foto: Macaulay Library
¿Cómo identificarlo?
Esta especie de colibrí se caracteriza por ser mediano, de pico corto y puntiagudo. Tiene un plumaje denso y esponjoso, haciéndolo parecer más grande de lo que es. Su cuerpo, generalmente, es verde opaco. Si es macho, tendrá una raya verde puntiaguda en la garganta bordeada de blanco y una cresta a blanco y negro; si es hembra, tendrá una banda blanca ancha a través del pecho que se extiende hacia los lados del cuello y las plumas externas de la cola serán blancas. Además, a diferencia de otros colibríes, El Barbudo de Páramo suele aferrarse a las flores cuando se alimenta, en lugar de revolotear frente a ellas.
Foto: Macaulay Library
Aunque El Barbudito está catalogado como especie bajo “preocupación menor”, su población se reduce progresivamente. La pérdida de hábitat es su principal amenaza, generada en gran parte por:
- Actividades de ganadería como el pastoreo (llevar animales para que se alimenten) en áreas de conservación.
- Presencia de pescadores alrededor de los cuerpos de agua, amenazando los sitios de anidación.
- Incendios forestales.
Estos factores generan daños graves a los ecosistemas de páramo, pues producen cambios en su fisionomía, convirtiéndolos en terrenos no aptos para El Barbudito, cubiertos por pajas y pastos altos, conocidos como pajonales.