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Ismael Colin Mar, docente visitante de la Universidad de Ixtlahuaca en México. Foto: Archivo / Plataforma Digital

Recién llega uno -en su multiplicidad corporal y cultural- a un lugar donde todo le es diferente y familiarmente ajeno, donde los objetos, sonidos, colores y olores, son una experiencia emotiva que impacta y abruma de forma casi ininteligible. Al paso, se va descubriendo que no todo es extraño y que la tranquilidad, llega en la medida en que lo humano se hace presente.

Todo a través de la necesidad de comunicar lo otro con el otro, lo que está apropiado culturalmente y desapropiado por significado, busca encontrarse en los sentidos, cuando estos se liberan del paroxismo. Así, el reposo ni siquiera se vislumbra en la incesante experiencia vivencial, que atosiga en espera del descubrimiento y la confirmación de que no todo es ajeno.

Los espacios no significan igual, aun cuando la utilidad es extensiva. El locus le acontece un universo de objetos que representan una multiplicidad de significados, pero que se extiende como un espacio absoluto. Todo se arremolina, es avallasante el mundo de los objetos, el mundo de la vida humana, luego se disipa para significar otra sensación, otra emoción. En el sosiego se encuentra el espacio relativo, que justamente aparece cuando todo cobra sentido.

Luego las figuras retóricas del lenguaje que acompañan el desconcierto primero, y la resignificación después, son el síntoma de una necesaria relocalización, porque en el fondo cuando se quiere pertenecer, se busca la atadura que liga con la memoria, con el pasado-presente simultáneo y simbólico. Las entrelineas de este texto plantean un ejercicio catártico de aproximación con lo velado, para lograr -quizá- des-velar los tejidos sensibles de la experiencia dialógica de la interculturalidad.

Así en estos diálogos perceptivos y perceptibles, se configura la experiencia vivencial de aquello que nos vincula con el otro, para convertirse en el nos-otros.

Las obras que se realizan en la vía al aeropuerto no revisten contratiempos en la movilidad. Foto: Google Maps/Plataforma Digital

Desde hace cinco meses la vía que conecta a Bucaramanga con el Aeropuerto Palonegro presenta arreglos en su infraestructura con los que se busca mejorar la movilidad en el sector.

En junio pasado, el Instituto Financiero para el Desarrollo de Santander, Idesan, otorgó al Consorcio Vías Aeropuerto 2019, el contrato de la obra por $41 mil 444 millones, dando inicio a labores en agosto de 2019; cuyo trabajo denominan reparcheo y consiste en el mejoramiento o cambio del pavimento que por condiciones del tiempo se puede ver deteriorado.

Con respecto al tiempo que toma realizar una obra como esta, el Ingeniero Civil consultado por Plataforma Digital, Juan Forero, “depende de la programación del constructor y de las restricciones que se tengan para el tránsito de los vehículos, generalmente no se puede reparchar un tramo completo, sino por carriles para tener el control del tráfico”.

Esto se ha visto evidenciado en la obstaculización del paso vehicular en los últimos meses, así lo confirma Daniela Torres, habitante de Lebrija quien a diario usa la vía afectada: “En mi caso, que voy hasta la universidad, duro una hora y cuarto normalmente, pero con los trancones a veces son dos horas o dos horas y media, por lo que se detiene la vía y esta es la única que tenemos para ir a Bucaramanga”.

Pese a que algunos ciudadanos como Daniela Torres aseguran que se han visto perjudicados por la obra, Miguel Soto, Jefe de Prensa del Aeropuerto Internacional Palonegro, manifiesta: “Nosotros como aeropuerto no nos hemos visto afectados, los pasajeros han llegado a cumplir sus itinerarios sin más”.

Se espera que la obra se desarrolle sin contratiempos para garantizar que el tránsito vehicular circule con normalidad.

Foto suministrada por la página oficial de Metrolínea

A partir de este 27 de enero regresa con normalidad al área metropolitana de Bucaramanga la ruta RE1, que va desde el Portal del Valle del municipio de Piedecuesta hasta la Estación UIS, en Bucaramanga, de acuerdo con Metrolínea. Varios usuarios manifestaron estar contentos por el retorno de la ruta, como lo es el caso de Francis Rangel, usaría frecuente del sistema, quien manifiesta que “es un alivio el regreso del RE1, puesto que es más rápida, no tiene tantas paradas y no se tiene que hacer transbordos”.

Por otra parte, el alimentador AB2 que cubría las zonas de Porvenir, Carrera 33 y Bethlemitas, será reemplazada por la ruta AP4, la cual cumplirá con el siguiente recorrido: inicia en el barrio Porvenir llegando a Provenza Oriental; posteriormente, Provenza Occidental, donde los pasajeros deberán realizar un trasbordo con la ruta P13 que seguirá con el recorrido por Cacique tomando la carrera 33 hasta llegar a Megamall, con destino final en la UIS.

Asimismo, los consumidores del servicio afirmaron que este cambio es perjudicial para los habitantes del barrio Porvenir, debido al poco flujo del transporte público en el sector, ya que se generarían largas filas en la estación de Provenza a la hora de realizar los transbordos.

Defensores del bolo criollo desean que no desaparezca del imaginario de la comunidad y que permanezca para las futuras generaciones. Foto: Julián Sandoval/Plataforma Digital UPB

Hace 200 años, en el municipio de Macaravita de la provincia de García Rovira, nació una expresión cultural popularizada como un deporte en Santander, a tal punto de instaurarse en las familias, especialmente en las zonas rurales del departamento comunero. A esta actividad se le conoce como el bolo criollo.

Una modalidad deportiva que cuenta con una trayectoria amplia, iniciando como una necesidad de entretenimiento en los campos y veredas, donde los arrieros que movilizaban las mercancías, cargaban siempre con una bola de madera y a orilla del camino pues había escenarios ásperos y llenos de arena. Los residentes de las zonas aledañas prestaban los palos, y así jugaban partidos largos apostando la quedada de la noche, el guarapo y hasta sus propios animales. (Reproducir video sobre la tradición del bolo criollo).

Estos partidos se han realizado durante décadas, pero cada vez van cambiando las reglas y la forma de juego. La más reciente consta de la ubicación de un tronco o una línea en el suelo intentando marcar la salida a lo que el participante se ubica detrás y cuando ya esté listo selecciona “la bola de confianza”. Todas pesan alrededor de dos libras y están hechas de aluminio, pero según Héctor Hernández Mateus, asesor y especialista del bolo criollo en Santander, hay una que da la “suerte” y es allí cuando el competidor intenta lanzar la bola lo más lejos posible para tumbar los tres palos, hechos de madera, los cuales se encuentran ubicados al otro extremo de los jugadores, aproximadamente a diez metros, en línea recta, uno detrás de otro. (Ver infografía sobre cómo se juega el bolo criollo).

Es notorio cómo el bolo criollo ha ido en decadencia, perdiendo su importancia en el pueblo santandereano, especialmente los ciudadanos del área metropolitana de Bucaramanga, donde solo se cuenta con 15 canchas para la disputa de los partidos. A pesar de que esta expresión cultural está en detrimento, personas como Hernández Mateus están a favor de su conservación: “Queremos que el bolo criollo no desaparezca del imaginario de la comunidad y que permanezca para las futuras generaciones”.

​Al igual que Héctor Hernández, la familia Durán Rey no quiere que el bolo criollo se extinga, siendo una tradición que ha calado en todas las generaciones como sucedió con Ángela Moreno Durán, quien narra entre risas lo que primero se le viene a la mente cuando le dicen ‘bolo criollo’. “Me trae muy buenos recuerdos porque siempre nos reuníamos en la finca de mis abuelos con toda la familia (…), pero hoy en día no le dan al bolo criollo la importancia que se merece porque a los jóvenes les da ‘oso’ practicar este deporte, ya que está de moda jugar el bolo americano y al bolo criollo lo ven despectivamente”. Doña Herminia Rey, abuela de Ángela Moreno relata que “ahora con los jóvenes es difícil, porque ellos se dedican a otras actividades (...) y no comparten con la familia, llegando a un punto donde se alejan de la sociedad, dejando de lado esta práctica y sus riquezas”.

​Herminia Rey de Durán fue la mujer que integró el bolo al corazón de su familia y cuenta que la primera vez que jugó fue a la edad de 40 años cuando vivía en el municipio de Lebrija, en Santander, cuando en un evento que se estaba preparando exclusivamente para los hombres de la región. Tuvo la idea de hacer uno también para mujeres alegando que “también tienen el derecho de hacer parte de este deporte”; desde entonces, es más que una expresión cultural, se convirtió en una tradición familiar que terminó por inculcarle a sus hijos, quienes terminaron formando parte de un equipo de bolo criollo y asimismo, participando en los diversos campeonatos. (Escuchar especial radial sobre esta tradición).

De acuerdo con Orlando Acevedo Pinzón, coordinador de la Secretaría de Cultura de Santander, el bolo criollo “es considerado un deporte tradicional en Santander, (…) mas no una actividad artística y cultural”. No obstante, la ordenanza número 036 del 6 de diciembre de 2010, institucionaliza al bolo criollo como una expresión cultural y a su vez, como una modalidad deportiva.

Martes, 17 Diciembre 2019 09:32

Los Simpson: 30 años de sarcasmo

Esta familia de piel amarilla, ojos grandes, cuatro dedos y a quienes nunca les pasan los años, continuará dando de qué hablar y por qué no, poniendo a pensar a la sociedad.

La cadena FOX, una de las más prestigiosas productoras de televisión de Estados Unidos, confirmó en febrero de este año la realización de las temporadas 31 y 32 de Los Simpson, lo que garantiza la permanencia al aire del programa al menos hasta el año 2021. El anuncio causó revuelo entre los fanáticos del show que siguen el programa por todo el planeta desde el 17 de diciembre de 1989, pero también entre sus detractores, quienes igualmente se extienden por todo el mundo y lo consideran un producto televisivo que promueve antivalores e irrespeta a la sociedad. Se puede estar a favor o en contra de Los Simpson, pero lo que no se puede desconocer es su valor como un fenómeno de masas que, con más de mil millones de espectadores en todo el planeta, ofrece una crítica sarcástica a la cultura popular norteamericana.

Tal vez allí radique el rechazo que en algunos sectores produce este show: a las personas no les gusta sentirse criticadas y mucho menos cuando la crítica proviene de un programa de televisión, en formato de caricatura y, por tanto, con una alta dosis de humor y exageración.             

La hegemonía de los medios masivos de comunicación, el poder del capital, la imposición de ideologías políticas y religiosas, el machismo y la sexualidad, son solo algunas de las temáticas recurrentes en el universo de un Springfield, que bien podría ser cualquier ciudad norteamericana, y que ha pisado los callos de importantes sectores de la sociedad.

Ad portas de cumplir 30 años ininterrumpidos al aire y con casi 700 episodios emitidos, el programa se ha consolidado no solo como la serie de ficción más longeva de la televisión norteamericana, sino también como un fenómeno global, lo que ha llevado a su creador Matt Groening a tomarse ciertas concesiones y extender su crítica a otros rincones del planeta.

Su burla a la ortodoxia inglesa, su sátira al aislamiento australiano y su crítica mordaz al caos brasilero, han sido solo algunas de las incursiones del programa en el abordaje de otras sociedades del mundo, como contexto para desarrollar su propuesta de sarcasmo y humor.

Ni hablar de la capacidad predictiva que ha desarrollado el programa a lo largo de estas tres décadas: La llegada de Donald Trump al poder, la caída de las Torres Gemelas y hasta la goleada de Alemania a Brasil en un mundial de fútbol, han sido algunas de las predicciones más recordadas de Los Simpson.

Probablemente la serie haya perdido el encanto de sus primeras temporadas al aire, pero mientras el mundo siga manteniendo como temas de discusión aspectos como la religión, la política y la sexualidad, seguramente esta familia de piel amarilla, ojos grandes, cuatro dedos y a quienes nunca les pasan los años, continuará dando de qué hablar y por qué no, poniendo a pensar a la sociedad.

Lunes, 16 Diciembre 2019 17:41

Cultura coreana aporta valor a Santander

Cultura coreana aporta valor a Santander

Ramen, kimchi y bibimbap son algunos de los productos coreanos que se pueden encontrar  inmersos en Santander propiciando un intercambio gastronómico que se mezcla con la comida típica de la región como el mute, el cabro y la pepitoria.

Sumado a la gastronomía, otras prácticas culturales coreanas se han visto inmersas en la región, gracias al intercambio de profesionales como Jumsen Kim, un profesor coreano de 27 años, quien ejerce sus labores en el área de mecánica en el Instituto Técnico Superior Damazo Zapata.

Más conocido por sus alumnos como Santiago, Kim proviene de Busan, Corea del Sur y desde hace un año llegó a Bucaramanga gracias al convenio entre la Agencia Coreana de Cooperación Internacional, Koika, y el Instituto de Empleo y Fomento Empresarial de Bucaramanga, Imebu.

En el taller de metalmecánica, entre sus clases prácticas y teóricas de torno  Santiago enseña sobre su cultura a los estudiantes de décimo grado, quienes se muestran interesados en este tipo de temas. Así lo manifestó David Santiago Prada, estudiante de décimo grado, “Es bastante novedoso y chevere, poder socializar con alguien nuevo, no estar siempre con los mismos temas, es aprender más y tener más conocimiento sobre los diferentes países”.

De acuerdo con Natalia Durán, Jefe de la Oficina de Asuntos Internacionales en Bucaramanga, OFAI, el propósito de esta alianza es mejorar la economía de las pequeñas y medianas empresas de la región, dando la posibilidad de intercambio hacia Corea para que aprendan técnicas de innovación empresarial y en contraprestación, desde Corea asistan ciudadanos en calidad de voluntariado o pasantía. Es una oportunidad para toda la población santandereana, pues además de trabajarse temas del ámbito económico, el convenio con Koica representa una experiencia social e interpersonal para ambos países.  

Durán afirma que “El convenio ha abierto puertas en distintos asuntos en la ciudad pues varias instituciones ajenas a la administración pública también han realizado aportes para mejorar el desarrollo cultural”.

Enriquecimiento cultural

Pero no solamente los aportes coreanos son educativos, un ejemplo de esto es Hwan Bobby, un coreano que se encuentra viviendo hace seis años en Bucaramanga, enseñando su idioma y la preparación de alimentos a las personas que se interesan por este tipo de prácticas, lo que hace que haya un enriquecimiento en la parte cultural. 

Laurentino Rodríguez, Sociólogo e historiador de la Universidad Cooperativa manifiesta que la cultura permite a los pueblos aprender, pluralizar y el encuentro de muchos estilos y formas de vida, lo que "contribuye al entendimiento y a la diversidad humana, y permite la tolerancia, una sociedad metropolitana, en donde fluyen diferentes concepciones y permite mayores niveles de convivencia”.

Mientras estas actividades culturales se desarrollan en la ciudad, la Alcaldía de Bucaramanga aplicó a un nuevo proyecto con una duración de tres años con el gobierno coreano, donde se espera articular distintos actores de la sociedad santandereana, para ir y conocer la experiencia de Corea en temas de desarrollo económico, enfocado en la Mipymes, y así impulsar a Santander con visión internacional.

En el seminario participaron 57 ponentes entre académicos, juristas, activistas, representantes del gobierno nacional, periodistas y directores de medios. Foto: Jaime Moreno/Plataforma Digital

Con temáticas como justicia para la libertad de prensa, roles de la ONU, los medios de comunicación, la academia y la sociedad civil, se realizó este lunes en Bogotá el I Seminario ‘Justicia para la Libertad de Prensa: violencia contra periodistas y costos democráticos de la impunidad’, organizado por la Fundación para la Libertad de Prensa, FLIP, y la Unesco.

El evento, que contó con la participación de 57 ponentes entre académicos, juristas, activistas, representantes del gobierno nacional, periodistas y directores de medios, entre ellos Plataforma Digital, tuvo como objetivo la discusión en torno a las amenazas contra la prensa, el rol protagónico que actualmente tienen las nuevas tecnologías para la democracia y los retos que existen para enfrentar estos desafíos. La FLIP registró que entre los años 1977 y 2019 se han evidenciado 160 asesinatos de periodistas, casos con altos niveles de impunidad.

De acuerdo con su director, Jonathan Bock, en este encuentro se discutieron los principales hallazgos recolectados durante la investigación de los Indicadores de Seguridad para Periodistas, ISP, por lo que se abordaron tres ejes temáticos con la participación de diferentes expertos que realizaron sus comentarios a la luz de los hallazgos encontrados y al finalizar las discusiones en las cuatro mesas establecidas para tal fin, cada uno de los participantes hizo sus observaciones a los resultados de la investigación.

Por su parte, el director de la Asociación Colombiana de Facultades de Comunicación, Afacom, Alberto Martínez, enfatizó que evidentemente, los periodistas están bajo riesgos: “Es un tema que no se resuelve solo desde la autoprotección del mismo periodista, sino que deben tenerla por parte de medios, así como del Estado, los organismos de control y de la sociedad civil”; agregó además que la dignificación del salario es un elemento fundamental por lo que “con malos salarios también se matan a los periodistas y eso tenemos que revisarlo”.

Frente a esto, Adriana Hurtado, presidenta de la Federación Colombiana de Periodistas, Fecolper, aseguró que es importante poner en conocimiento las diferentes metodologías y los esfuerzos que realizan las organizaciones de la sociedad civil con el fin de proteger al periodista y a su vez a la libertad de prensa y de información.

Es así como Fecolper participa de una construcción de política pública de libertad de expresión y de la reparación colectiva a periodistas pues “si bien hay una normativa que aparentemente protege a la actividad periodística lo que vemos es que en el terreno de la realidad esta no se cumple porque priman más los intereses comerciales o mediáticos inclusive la línea de algunos medios de comunicación que de acuerdo a investigaciones que hemos hecho tienen no solamente intereses en el campo de la información sino en diferentes sectores de la economía nacional”.

El encuentro concluyó con la reflexión desde las cuatro mesas temáticas propuestas, entre las que se encuentran las labores del Estado, la academia, la sociedad civil, los medios de comunicación e incluso, los proveedores de servicios de Internet y telecomunicaciones en cuanto a la vigilancia de la protección de los datos en la red.

Las cifras según la FLIP

De acuerdo con cifras entregadas por esta Fundación, en el año 1998, Colombia ocupó el primer lugar en la lista mundial de periodistas ejecutados, siendo catalogado como el “lugar más mortífero para la prensa en el mundo”.

Entre 1977 y 2015 fueron ejecutados un total de 152 periodistas colombianos en razón de su oficio, y más de la tercera parte de estos homicidios ocurrieron entre los años 1996 y 2005, de acuerdo con cifras del Comité para la Protección a Periodistas 'Resúmenes por país: Colombia', así como la Corte Internacional de Derechos Humanos: caso Carvajal Carvajal y otros.

El papel de la academia

Uno de los puntos de discusión en este encuentro fue el rol de la academia dentro de la defensa por la libertad de prensa y el aprendizaje del autocuidado al ejercer la profesión. Fue así como se debatió en torno a la importancia de una reflexión permanente en cuanto a la ética periodística, así como la implementación de códigos de prácticas periodísticas seguras y el levantamiento de mapas de riesgos desde el aula de clase, sin dejar de lado estas mismas en dispositivos electrónicos, especialmente los móviles.

Frente a los desafíos digitales que se tienen en este momento para el proceso democrático y para el ejercicio de la libertad de prensa, el coordinador general de la Red de Periodismo Universitario y docente de la Universidad Pontificia Bolivariana, UPB, Joaquín Gómez Meneses, aseguró que uno de ellos es la calidad de la información asociada fundamentalmente a la veracidad de la misma dado a que los riesgos que se presentan son la precisión de información falsa que está circulando muy rápido y que es muy notorio sobre los acontecimientos que incluyen que el periodista juegue como un gestor de la información, incluida la verificación.

A este proceso periodístico formativo se sumó el de la importancia de que las compañías proveedoras de Internet, de tecnologías de la información y de telecomunicaciones cuenten con políticas transparentes y claras frente a la liberación de datos personales a agencias gubernamentales y a las autoridades.

Frente a esto, el catedrático José Luis Orihuela, profesor de Comunicación Multimedia en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, en España, detalló que las principales plataformas digitales como es el caso de Google, Facebook, Apple, Amazon y Twitter cuentan con portales de transparencia en los que suministran informes periódicos acerca de los requerimientos de información que reciben por parte de las autoridades nacionales de los países en los que operan: Informe de Transparencia de GoogleFacebook Transparency ReportApple Transparency ReportAmazon: Law Enforcement Information RequestsTwitter Transparency Report

Orihuela aseguró además que los portales de transparencia de las plataformas tecnológicas también incluyen información acerca de cómo se protegen los datos de sus usuarios. Evidentemente, tanto las revelaciones de Edward Snowden como el caso Cambridge Analytica han puesto de manifiesto las grandes vulnerabilidades a las que se ven sometidas las informaciones de los usuarios en las plataformas tecnológicas.

Fue así como concluyó diciendo que Los medios de comunicación pueden mejorar la seguridad de sus periodistas ofreciendo mejor formación en ciberseguridad y facilitando herramientas de encriptado para sus comunicaciones y archivos. De igual forma, los medios también tienen que ofrecer seguridad a sus fuentes. El establecimiento del buzón de denuncias ciudadanas es una iniciativa que recoge la exitosa experiencia de Wikileaks a la hora de suministrar una plataforma segura para denuncias anónimas.

‘Orden de un guerrero’, el tesoro de Adriana Duno

Hace 11 años, después de haberse graduado como profesional, Adriana Ximena León Pinto, inició su vida como escritora. Es egresada de la Facultad de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Pontificia Bolivariana, seccional Bucaramanga, y ha tenido una trayectoria notoria en la literatura. Colombia y Venezuela han sido sus lugares de inspiración, pues al obtener su título no dudó en residir en el país vecino para ejercer su carrera como periodista, pero también para hacer la literatura parte de su vida.

Con el tiempo sus planes fueron cambiando y la crisis que se presenta en Venezuela fue uno de los motivos, sin embargo, no fue un obstáculo pues, así como lo dijo ella “me sirvió para terminar lo que un día empecé: mi libro Orden de un Guerrero”

Con cuatro hijos, la colombo-venezolana Adriana Ximena León Pinto, más conocida como Adriana Duno por su matrimonio en Venezuela y además como una estrategia de marketing, dedicó una parte de su vida para escribir sobre varios temas que identifican a la humanidad e incluso participó 6 años en el taller literario de la Universidad Industrial de Santander, UIS, que en aquella época se llamó ‘Umpalá’.

Inició con una serie de cuentos dentro del libro, la cual tituló ‘Cuentos de encuentro’ que se puede apreciar solo virtualmente. Posteriormente, el proceso de ‘Orden de un Guerrero’ comenzó, pero le tardó algunos años terminarlo por lo que logró ser publicado en 2018. Hasta el momento es su más reciente creación, pero también tiene otros escritos por allí que está buscando el momento oportuno para “sacarlos a la luz”.

En una entrevista al medio Plataforma Digital, esto fue lo que respondió:

¿Cómo le ayudó la universidad en su proceso como escritora?

A.D: El campus me ayudó en mi proceso de formación como escritora porque fue ese espacio en el que adquirí tranquilidad e inspiración por el sentido humano, además la cercanía con la naturaleza permite que el cuerpo y la mente estén en mejores condiciones para poder encontrar y sujetar las ideas que necesita un texto.

¿Cómo logró enlazar el Periodismo con su vocación por la escritura de cuentos y poemas?

A.D: Escribir siempre ha sido importante en mi vida, incluso desde que empecé el periodismo, de hecho, decidí estudiar esta profesión por mi vocación por las letras, me recomendaron hacerlo y yo acepté porque me fluiría más. Al principio yo lloraba para escribir porque se me dificultaba, pero poco a poco a partir de generar ideas para el periodismo como escribir crónicas y otros géneros periodísticos, lograron que las letras ocuparan mi mente y después fuese fácil plasmarlas.

¿La crisis venezolana le fue impedimento?

A.D: No, al contrario, aproveché la crisis por la que aún pasa Venezuela para concluir mi trabajo en Periodismo ya que los pagos se tardaban, tenía estrés y además nacía mi tercer hijo, fue en ese momento cuando decidí terminar ‘Orden de un guerrero’. Quiero decir que la comunidad campestre en la que me encontraba a una hora y media de la ciudad de Maracaibo, me sirvió de mucho para concluir lo que sería mi tesoro más preciado.

Cuando murió Chávez empezó lo peor, pero yo no podía quedarme esperando un empleo porque ya era consiente que las empresas las estaba liquidando, allí decidí dar el siguiente paso con mi libro.

¿En qué se inspira para escribir?

A.D: Aunque escribo diferentes tipos de textos, no solo literarios sino también periodísticos, son varios temas y autores, pero resalto mucho mi fuerte inspiración por el escritor Jorge Luis Borges. En cuanto a temas me centro en relaciones del hogar, de familia y naturaleza, es por ello que aquí mi inspiración es por mis hijos y mi esposo.

¿Cómo está promocionando el libro?

A.D: En primer lugar, ha sido el voz a voz entre amigos y conocidos. Después entramos en un proceso de marketing digital por redes como Instagram, Facebook, WhatsApp y Twitter e incluso un blog.

¿Cuál es el argumento del libro?

A.D: Orden de un guerrero nace de una inspiración por resaltar las virtudes humanas y permitirle al lector que viva lo que tanto ha estado en su pensamiento, pues con los poemas quiero exaltar el amor.

¿Qué proyectos se vienen después de ‘Orden de un Guerrero’?

A.D: Estamos trabajando en cuentos infantiles para siguientes publicaciones y también en la parte ilustrativa que es también complejo porque se debe llevar una historia de manera gráfica.

¿En quién o qué se inspiró para escribir específicamente ‘Orden de un Guerrero’?

A.D: La inspiración nace desde mi interior, mi estado mental, espiritual e incluso psicológico en el que me encuentro. Si uno se siente bien y se siente acorde con la vida que lleva entonces ese ser interno le va dando respuesta a los planes que cada persona tiene en su vida.

Fui encontrando respuesta y fui encontrando los temas para adaptarlos al trabajo del campo. De esta manera conseguí que el poeta campesino que incluso un verso lleva su nombre, fuera primordial, pero también incluí poemas infantiles como `Caracol caracolito´ el cual lo escribí en 3 minutos, pero porque era el día y la hora. A mis hijos les gustó.

¿Por qué poesía y no otro tipo de género?

A.D: Escribía poesía escondida y era lo último que hubiese pensado en escribir realmente, lo mío era la narrativa como cuentos o crónicas periodísticas. Aunque he publicado muchas cosas, aún hay otras que están esperando su turno con temas de actualidad como el de migración que es un fenómeno de incalculable proporción. De todas maneras, me he dejado llevar por la poesía, incluso en el año 2000 escribí con unas amigas de la facultad de aquí y el contenido fue publicado como un ejercicio de práctica.

¿Qué espera en Colombia después de haber lanzado ‘Orden de un Guerrero’?

A.D: Para ser sincera, no tengo muchas expectativas. Siempre lo he dicho así porque uno sabe cómo es el mercado editorial, el cual es fuerte y competitivo. No le apuesto totalmente porque puede ser que dentro de un año este trabajo me dé o no, sin embargo, tengo claro que es un trabajo que nunca voy a dejar de hacer.

Imagen suministrada

El director de la Facultad de Comunicación Social - Periodismo de la Universidad Pontificia Bolivariana, Seccional Bucaramanga, Alfredo Álvarez Orozco recibió el pasado 26 de noviembre un reconocimiento especial por parte de la Asociación de Periodistas de Barrancabermeja, APB, por su meritoria labor como académico e investigador de la educación superior, en la promoción e impulso a la Comunicación Social, dignificación y reconocimiento profesional a los Comunicadores Sociales y Periodistas.

La entrega de este reconocimiento se dio en el marco de la versión de los Premios Pluma de Oro que año a año la APB realiza en Barrancabermeja, en Santander, donde Álvarez compartió una conferencia para hablar sobre “Los retos del periodismo en tiempos de la posverdad”.

“Desde niño supe que quería ser Comunicador Social. Soñaba estar en la radio, un gusto que viene de familia” manifestó. Cuando entró a la universidad empezó a desarrollar sus capacidades y a incursionar en la academia para enseñar el Periodismo. Por más de 17 años ha estado vinculado a la UPB, lo que le ha permitido transmitir el amor por la comunicación a todos sus estudiantes.

Foto: Jaime Moreno

Para detallar sobre los procesos que se derivan de la expropiación de predios, cuando estos son declarados de “interés público” por el Plan de Desarrollo del Área Metropolitana, Plataforma explica los procedimientos para estos casos.

Daniel Cifuentes Lozada es el menor de 13 hermanos, hijo de José Nicomedes Cepeda y Esther Lozada Rey, quienes durante alrededor de 80 años estuvieron a cargo de la administración del Cementerio Universal. Este cementerio público estaba en la intersección de la calle 45 con carrera novena, en el centro de Bucaramanga, y fue expropiado por el Municipio de Bucaramanga para darle paso a la construcción de lo que hoy es el Viaducto de la Novena.

La familia Cifuentes siempre supo que en algún momento las vías, circundantes al entonces cementerio, iban a ser ampliadas. Daniel Cifuentes relata que durante varios años el Municipio los buscó para negociar los terrenos, pero la familia no tenía en ese momento las escrituras de los predios, pese a que la propiedad familiar data de 1930. Por ello, acudieron a juicios de pertenencia que les permitieron acceder a las escrituras públicas del predio.

El 27 de abril de 2010 el Municipio emitió una Resolución de Expropiación para adquirir todos los predios necesarios para la construcción del Viaducto, una obra vial que permite conectar el centro de la ciudad con el barrio Mutis y la Ciudadela Real de Minas. La familia Cifuentes logró, ya con las escrituras, llegar a un acuerdo de compraventa tras un proceso de negociación con la Alcaldía.

Según esta resolución, el predio compuesto por 8.652 metros cuadrados fue avaluado en mil 152 millones de pesos. La negociación la realizó el municipio con Alfredo Cifuentes, el mayor de los hermanos, quien en una entrevista con Televisión Ciudadana en el año 2010 aseguró no estar conforme con el pago realizado por el Municipio (vea la entrevista aquí). La familia asegura que fue él quien se encargó de la conciliación y la distribución del dinero. Sin embargo, ellos tampoco quedaron “contentos” con lo recibido en la repartición hecha por Alfredo.

Plataforma le explica qué normas y procedimientos aplican para terrenos que han sido declarados de interés público. En los últimos años, el Gobierno Municipal ha desarrollado proyectos viales como el Intercambiador del Mesón de Los Búcaros, el Intercambiador de la Carrera 15 con Avenida Quebradaseca, la ampliación del tercer carril y la construcción del Viaducto de la Novena que han tenido afectaciones sobre viviendas, colegios y establecimientos comerciales.(Ver línea del tiempo)

¿Cómo negociar con el Estado?

Freddy Saavedra, abogado egresado de la Universidad Santo Tomás de Bucaramanga, explica las normas y los procedimientos que deben realizarse a la hora de negociar un predio que está en medio de la construcción de una obra pública.

Un predio es considerado de interés público cuando afecta la construcción de una vía u obra que beneficia a la comunidad. En estos casos, el Estado entra en contacto con el propietario para establecer una negociación que permita llegar a un acuerdo para la adquisición del terreno. Este procedimiento tiene distintas etapas.

Una vez el Estado se comunica con el propietario, hay una conciliación en la que ambas partes buscan acordar el precio del inmueble. En caso de que el dueño del terreno no esté conforme con el valor propuesto por el comprador, puede contratar un périto autorizado por la lonja, que es el gremio que agrupa a los avaluadores de bienes raíces, para que establezca cuánto puede costar el predio.

Saavedra explica que, si no se llega a un acuerdo en primera instancia, las partes van a un juicio en el que un juez es quien va a establecer cuánto es el avalúo de la casa y cuánto debe pagar el Estado al particular para que la entregue. Finalmente, en caso de que el propietario se oponga al dictamen, el Gobierno procede a expropiar el bien y el dinero se consigna a nombre del dueño en el Banco Agrario, ya que en este se realizan los depósitos oficiales.

En los próximos años, distintas obras como el Intercambiador de Fátima y el de Papi Quiero Piña se desarrollarán en zonas donde habitan cientos de familias que pueden verse afectadas. Por tal motivo, es importante saber cómo se desarrollan las negociaciones y cuáles son los mecanismos a los que los ciudadanos pueden recurrir en caso de que su inmueble sea declarado de interés público.

EMISORA ESTACIÓN V

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